Tras cuatro días de celebraciones, esta mañana, Castellar de la Frontera descansaba con su lunes de resaca y una valoración altamente positiva de las fiestas más importantes del municipio. Desde el Ayuntamiento se agradece a todos los vecinos y visitantes su talante y comportamiento, que han mantenido la tranquilidad y la alegría como tónica en el recinto ferial.